SARA MONO Y ALBA BOSCÁ

DE NUEVO POR EL CAMINO DE VUELTA

Nuestra propuesta, pretende difuminar la barrera entre la esfera pública y privada.
El muro, símbolo de separación entre ámbitos (exterior, interior), se intervendrá con el objetivo de crear
una comunicación entre ambos, vinculando las vivencias individuales con las colectivas.
Habitar con sensibilidad el lugar, compartir nuestras inquietudes a la par que escuchando las de las
personas que habitan el municipio, teniendo en cuenta que el proceso de intervenir un territorio que
no habitamos en nuestro día a día, puede cambiar el resultado del proyecto con tal de adaptarse a las
necesidades del contexto.
Tomar como puntos de interés las vivencias intergeneracionales, los saberes compartidos en torno al
mundo natural y el imaginario simbólico y cultural de los lugares a intervenir.